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  • Foto del escritorCanal DownTV VENEZUELA

Recomendaciones para aprovechar el tiempo de las personas con síndrome de Down durante la cuarentena


El confinamiento es una situación complicada para todos, más aún para las personas con discapacidad intelectual para quienes puede ser más difícil de entender y enfrentar.
 
Por este motivo es muy importante establecer rutinas que les ayuden y nos ayuden a afrontar el encierro de la mejor forma posible. Las rutinas aportan seguridad y por tanto reducen la ansiedad que provoca una situación en la que nadie tiene claro qué pasará en el futuro y sobre los cambios que vendrán a corto y largo plazo en todos los contextos.
 
Es por eso que nos aventuramos a brindar una serie de consejos para que nuestros hijos con discapacidad permanezcan no solo en buen estado psicológico, sino también en buena condición física y por supuesto, contribuyan a preservar sus funciones intelectuales.
 
En primer lugar, e independientemente de que no exista la posibilidad de acudir presencialmente a centros asistenciales, colegios o centros de trabajo, debemos intentar dar la mayor continuidad posible a nuestra rutina.

Particularmente en el caso de nuestra entidad, AVESID, y dada la grave situación por la que atravesamos, y preocupados como consecuencia de la incertidumbre que todo esto genera, padres, maestros o no, acordamos poner cada uno de nuestros talentos en beneficio de nuestros usuarios y pusimos en marcha un aula virtual multidisciplinar con el fin de ayudar a facilitar la atención durante esta contingencia. El programa EduCarte, que no es más que una unidad de vuelo que consiste en llevar la escuela a casa para trabajar en los ámbitos pedagógico, artístico y musical.  El estado de emergencia en el que se encuentra gran parte del mundo generado por la pandemia y sus graves consecuencias puede tener un efecto mayor o menor en el estado de ánimo de cada persona. Permanecer confinados en nuestros hogares es una situación compleja porque si algo nos caracteriza en la sociedad actual es precisamente la intensa actividad diaria a la que estamos sometidos.

Aunque en otros aspectos de la actividad diaria podemos permitirnos ser un poco más flexibles en cuanto a horarios, en rutinas como el sueño, la alimentación, el ejercicio y las actividades que favorezcan la estimulación cognitiva no deben faltar en nuestro horario de trabajo con personas con discapacidades intelectuales. Tener en cuenta que seguro no sabemos cuánto tiempo llevará la restricción de actividades presenciales, junto con la conveniencia de hacernos como cuidadores la decisión de la conveniencia de salir de casa teniendo en cuenta situaciones particulares de salud que definen el personas con necesidades especiales dentro de grupos de mayor riesgo.   Tener en cuenta que es posible que en algunos países la cuarentena se pueda relajar en mayor o menor grado, lo que no quiere decir que la enfermedad haya desaparecido, esto no quiere decir que vamos a poder salir en riesgo, porque el enfermedad si continúa latente; la decisión que tomamos de si es el momento adecuado para reanudar o no está ahí y de ahí.   Nuestra primera recomendación es respetar el horario habitual de sueño. Dormir le da a su cuerpo y cerebro tiempo para recuperarse del estrés del día. Después de una buena noche de sueño, las personas se desempeñan mejor y son más capaces de tomar decisiones. Dormir contribuye a sentirse más alerta, optimista y a relacionarse mejor con los demás. Dormir también ayuda al cuerpo a combatir las enfermedades. Es muy conveniente seguir las recomendaciones para apagar los dispositivos electrónicos o la televisión al menos una hora antes de acostarse.

Es recomendable comenzar la mañana con actividad física que les permita activarse. Hacer ejercicio es la mejor forma de oxigenar nuestro cuerpo, activar nuestro cerebro y combatir el sedentarismo y la obesidad. Hay bastantes videos divertidos en YouTube, por ejemplo, para hacer ejercicio: terapia de baile, yoga, locura, por ejemplo.
 
También es muy importante aprovechar la mañana, preferiblemente entre las 8:00 am y las 10:00 am para tomar el sol porque es en esta hora cuando los efectos de los rayos solares son menos dañinos para nuestra salud. Tomar el sol nos permite captar vitamina D, esto favorece el cuidado de la piel y el sistema óseo.
 
 El final del día se puede dedicar a realizar actividades más tranquilas y relajantes, como leer, escuchar música, hacer bellas artes o pintar, por ejemplo, en un ambiente cálido y agradable. Podemos motivar a nuestros hijos a que disfruten de los recursos en sus ordenadores o tablets: en la actualidad existen muchas actividades como la búsqueda de palabras, los juegos de memoria, etc. con las que no solo pueden distraerse sino también ayudar a conservar en buen estado las funciones cognitivas. También hay cursos y programas gratuitos que puede utilizar. Sin embargo, debemos tener cuidado en el tiempo que se dedica al uso de dispositivos electrónicos, ya que crean adicción y por ende aislamiento.
 
Podemos diseñar horarios de actividades en las que participe en la toma de decisiones, ya que esto contribuirá a la motivación para su seguimiento, así como a su autonomía, ya que tendrá claro qué hacer a lo largo del día.
 
La alimentación también es un aspecto fundamental a considerar. Hay que mantener los horarios habituales, comer sano y sin excesos. Los buenos hábitos alimenticios son la piedra angular de nuestra salud para lucir bien, sentirnos bien y no enfermarnos, y particularmente en esta emergencia global que no es para jugar; Nunca es un buen momento para enfermarse, pero este es el peor de los momentos: tener en cuenta que acudir a una consulta médica en este momento representa un mayor riesgo de exposición al contagio.

Las comidas deben ser espacios relajados y tranquilos para disfrutar del afecto y la relación familiar, donde conversamos y compartimos. Tratamos de evitar distracciones como la televisión y el uso del teléfono, facilita las buenas prácticas alimentarias y da la oportunidad de interacción social y desarrollo cognitivo.

Uno de los objetivos en esta nueva situación es mantener la normalidad, por lo que se recomienda mantener los hábitos de higiene habituales: levantarnos temprano como solemos hacer, vestirnos, peinarnos, como si fuéramos a salir a la calle. Es una disciplina que hay que mantener porque nuestro cerebro está entrenado para ello. Esta práctica nos ayudará a sentirnos un poco más normales.
 
Explique a su hijo las medidas de prevención recomendadas por la Organización Mundial de la Salud para la prevención de COVID19. Estas prácticas no son negociables y debes ser implacable con esto: entrena para mantener el lavado de manos frecuente y correcto y para contar del 1 al 20 mientras te enjabonas las manos, usas el gel desinfectante, no te tocas la cara, que cuando toses o estornudas cúbralo con los codos y no con las manos. Las medidas extremas nunca serán demasiado.
 
Finalmente, debemos tomar conciencia de que la mejor manera de salir de la emergencia es trabajar juntos, y el objetivo es mantenernos saludables física, mental e intelectualmente hablando.

Una forma de incluir a las personas con discapacidades es brindarles tanta información como sea posible y ACCESIBLE sobre lo que está sucediendo. Son agentes activos dentro de la sociedad y enfrentan una situación de riesgo similar o mayor.
 
No los dejes fuera.
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